VALORES APROXIMADOS
Yo no hablo chino.
Y no es un detalle sin importancia. No, al menos, si te gusta comprar en los supermercados asiáticos regentados por ciudadanos chinos del centro de Madrid.
Y voy por ahí sin complejos, no os creáis. A veces voy tan libre de todo, que compro comida en lugares donde toda la información dentro del supermercado está escrita en chino, con un breve texto en castellano porque lo deben exigir en la aduana, que suele decir algo menos que nada, y muchas veces está traducido a golpe de google translator.
Y así me pasa.
Voy a comprar a uno de estos supermercados, porque necesito una bolsita de shiro miso. En el camino a la caja, me quedan adheridos a las manos otros dos productos [los campos magnéticos de estos supermercados son una cosa a estudiar, a mí, se me pegan cosas], una bolsa de nabos encurtidos agripicantes que no tengo ni idea de cómo se comen o a qué pueden saber, y unos noodles de taro.
Estos noodles de taro.
Que es una deducción, porque google translator ha traducido como-sea-que-se-llame-esto por «Harina taro. Ingredientes: taro, agua, sal». Pero no es harina, son tallarines, es decirse, noodles, que suena más asiático aunque los tallarines en chino se denominen mian.
A lo que vamos que me pierdo.
Que voy yo con mi bolsita de noodles de taro, con su brevísima información en castellano. Ni instrucciones, ni sugerencias, ni una triste receta, nada. Pero no importa. El mundo está lleno de cosas por descubrir, y la inmensa mayoría de ellas salen del estante de un comercio asiático.
En la bolsa, con un extenso texto en chino en un lado y la foto de una familia feliz de los años sesenta en el otro, distingo dos números dentro del barullo de ideogramas, un 3 y un 5, bastante próximos entre sí.
Y yo, que a veces me creo muy lista, porque mi abuela me lo decía siempre, me digo toda autocomplacida «Esto significa: Cocer entre 3 y 5 minutos. Si no hacía falta hablar chino!». Aún así, como la autocomplacencia me la ha jugado alguna vez en el pasado, le pregunto a la cajera por si acaso.
-Disculpa, ¿esto cuánto tiempo hay que cocerlo?
– No sé. Fideo koreano.
Vale. El fideo es koreano, tú eres china y te la repampinfla porque tú no comes cosas koreanas. No importa, es entre 3 y 5 minutos. No te necesito, ciudadana china que no come noodles koreanos.
El problema empieza en casa. Pongo agua a hervir, meto los noodles, espero 5 minutos… y aquello flota dentro del agua tan tieso como entró. Vale. Será que en China el agua hierve más rápido. Les doy 5 minutos de cortesía. Y otros 5. Y 10 más. Y añado agua. Otros 10. Va, unos 15… ¡en algún momento tendrá que cocerse!
Por fortuna, los dígitos 3 y 5 no significaban de 3 a 5 horas, que bien podrían. Mis noodles de taro estaban listos en unos 60 minutos, aunque interrumpí el hervor tres veces para poner agua, así que igual en 45-50 minutos podrían estar listos. Una tontería de na.
[Edito: Se cuecen en 25 minutos, fue lo que tardaron los que compré posteriormente]
Se han salvado, y no entran a mi lista de compras malditas porque son absolutamente deliciosos. Incluso solos están impresionantemente ricos, dulcecitos y sabrosos. No son un fideo insípido, son un noodle con carácter propio. Una maravilla.
Están hechos con taro, o malanga, que es una raíz o tubérculo similar a las patatas pero en peludo, y que a mí me chifla. Por eso los noodles se vinieron conmigo.
Son gruesos, muuuuy gruesos, y consistentes. Y deliciosos, insisto. Están realmente ricos, y voy a comprarlos más veces, y a cocerlos en olla tapada con mucho agua unos 45 minutos, del tirón y no a trompicones.
Y es que una cosa hecha con harina de taro y que se cuece en … ejem … unos pocos minutos … no podía salir mal!
Agua, 2-3 cucharadas
MODUS OPERANDI
Ponemos una olla con abundante agua a hervir, y una pizca de sal. Cortamos los espárragos en trozos, y los dejamos cocer unos 5 minutos, no más. Retiramos y reservamos.
En el mismo agua, ponemos algo más de sal y cocemos los fideos. Si son de taro, tardarán entre 25 y 30 minutos, si son fideos instantáneos tipo vermicelli, udon o soba, en 5 o 6 minutos los tendrás listos.
Cuando los fideos estén a punto de terminar, empezamos con la verdura y el aderezo.
Para el aderezo, mezclamos todos los ingredientes en un bol [el ajo picado menudo, y el jengibre rallado] y reservamos.
Para la verdura, limpiamos y pelamos la cebolla y el puerro, lavamos los champiñones y el pak choi, y lo cortamos todo a nuestro gusto.
En un wok con una cucharada de aceite, salteamos a fuego vivo primero la cebolla y el puerro, cuando estén un poco blandos añadimos los champiñones, y finalmente el pak choi, que se saltea un minuto o dos como máximo.
Añadimos entonces el aderezo [si necesita un poco más de agua la ponemos], lo dejamos reducir un minuto, e incorporamos los fideos ya cocidos y escurridos al wok.
Tienen muy buena pinta. Un besazo.
Da igual que no hables Chino,hasta uno de aquellas tierras te lo perdonaría al ver tu deliciosa receta¡¡¡
Muchos Besitos¡¡
Toma recetón. Yo estoy buscando taro para una receta de la polinesia (pero el bulbo), pero aquí en Granada ni de broma. ¡Qué caña que hayas encontrado estos noodles! Te ha salido un plataco delicioso, aquí, en China, en Corea y en cualquier lado.
¡Un beso!
Pues ya sabes lo que te toca… buscar un coreano que te explique una receta para estos noodles :P jaajaaja
Mira que he comido comida coreana, pero estos noodles no los conocía… aquí en Holanda será como que no, pero si los encontrase, y como vienen recomendados por ti, seguro que me los llevaría a casa; que aquí, igual que en Madrid, en estos comercios los productos tienen ondas magnéticas que se pegan a mis manos ;)
besos!
ostras!!! que acabo de buscar el taro en googles imágenes… y de eso sí tenemos por aquí!!! Habrá que probar aunque sea el bulbo :D
Ahora me fijaré cuando vaya al super Chino (asiático), seguro que el de allí es más completo, aquí todo esta traducido y bien traducido, o igual me fijo si hay alguno de la «China profunda»… mira que los Udón no me entusiasman por su grosor pero si dices que estos están tan ricos me dejas con ganas de probar.
nunca he comprado nada en un supermercado chino, es más, me mosquean los supermercados chinos porque no entiendo nada de lo que compro, y yo soy muy de «valencianizar» los productos, vengan de donde vengan,los cocino como si fuesen productos de aqui, y claro , los desvirtuo, pero me da lo mismo.
Mi amiga china, con la que me fui a comer en mi entrada de sushi, me regaló hace un tiempo una bolsa de una cosa parecida a pescado seco, curado, del tipo mojama de atún… mi hijo se lo comía a pellizcos y yo … yo terminé tirándolo a la basura porque no me fío… soy asi.
Después hablando , bueno hablando por señas y con el traductor y google del tfno, me explicó que aquello no era pescado, sino carne curada, cerdo, como una especie de jamón curado en salsa de soja, de ahí que me supiese a pescado. aún asi lo pruebo todo, pero prefiero probarlo yo, y no mis hijos, por aquello de que sobrevivan a una posible salmonella y perpetúen mi apellido jajajaja.
Yo tu plato lo veo sensacional, pero sin duda lo haría con tallarines de occidente, que ya te digo.. no me fio jajajajaa.
besos!!
No he probado estos noodles nunca, pero a pesar de todo te has montado un buen plato y bien combinado.
Y no creas que solo las tiendas chinas tienen «ondas magnéticas» que se pegan a las manos, creo que eso nos pasa en cualquier tienda a mas de uno.
Bss
Hola, ya voy tomando nota para probar el taro, la pinta la hacen riquísima, a buscarlos se ha dicho :)
besos
Jajajajaj siempre me haces reír un montón. Lo que tienen los supermercados asiáticos es increíble, a mi tambien se me adhieren mil cosas sin querer cuando voy a buscar algo, y a veces me quedo tanto tiempo dentro solo mirando que empiezan a sospechar de mi… En todo caso no había visto nunca unos nooodles tan gordos (y mira que tienen variedades eh), ni sabía de la existencia de esto del ‘taro’ misterioso, pero cualquiera que sean los noodles, en sopa de miso quedan estupendos o soja y especias y jenjibre…. me vuelven loca!!! , Y ahora con este fresquito más. Quizás es la ‘harina de taro’ lo que les da ese sabor tan bueno que dices jejeje, si los veo alguna vez, los compro!
Qué plato tan fabuloso te has marcado. Tiene que saber a gloria.
Un fuerte abrazo
Clara
Que curioso, a mí me suele pasar lo mismo en este tipo de supermercado, que tendrán que tendran¡ Una receta viajera riquisima¡ muaks¡
Jajajajaja Ana, que cosas te pasan y como me gusta leerte, después de todo te ha quedado un plato delicioso, me encanta, te lo copiare.
Besinos
El toque de Belén
Me chifla la comida asiática! (y eso que nunca he ido a comer a un chino). En casa siempre preparo tallarines o fideos de arroz con todas las variedades de salsas y cositas que encuentro que suenan a asiático, así que sin duda esta será la próxima receta que prepare en mi día de la comida china (o mejor dicho koreana jajajaajaja)
Ana, definitivamente puedo decirte – desde la otra punta del planeta, del charco y del planisferio Mercator – que en los supermercados chinos del mundo entero hay una confluencia de energías magnéticas que generan la adhesión (a las manos, changos/carritos de compra, canastos…) de más productos que aquellos por los cuales hemos acudido al lugar en pos de comprar “alguna cosita”. De igual modo, parece ser una cuestión estandarizada (vendrá, tal vez, impartida por el propio establishment chino, sus embajadas y consulados en el mundo) que todo lo que allí se exhibe con el propósito de su venta carezca del mínimo indicio de su contenido; vale decir: escasa traducción en la góndola/estantería o en el envase mismo del producto y, de haberla, prácticamente inentendible… Y una, sin embargo, se deja seguir siendo seducida por productos del mundo astático en general que, más adelante, verá (en muchos casos) cómo, cuándo y para qué utilizará. Pero, eso no importa porque volvemos felices con todos los tesoros que hemos descubierto gracias a la intuición, el azar, la experiencia previa y el famoso ensayo-error. Jajajaja :P
En cuanto a tu propuesta, me parece de lo más sabrosa e interesante, con muchos ricos complementos que en boca han de lucirse por todo lo alto.
Saludos.
Madre mía pobrecilla al menos te salió bien jaja
Ay dios mío! Es leerte y verme reflejada en tus palabras!!! Te puedes creer que averigüé dónde estaba una tienda china en una tienda inglesa, preguntando por ella en inglés claro y que me hice 40km para ir a la tienda???!!! jajaja Y claro, yo iba solo a por algo así como poison fish y salsa de soja oscura y me volví con un par de bolsas que pesaban más que yo y sin efectivo (que por suerte llevaba bastante) ya que no sabía que no se podía pagar con tarjeta y en un barrio que de noche y sola no se yo si dejaría ahí mi coche y me iría de compras jajaja Bienísimo estos noodles, yo quiero volver (y tengo más de la mitad de las cosas por abrir y averiguar su utilidad porque como bien dices ni etiquetas ni ná de ná) pero me quedé con las sganas de coger un montón de pastas varias más.
besos
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HAHAHAHAHAA!!! Me he meado de la risa con toda tu aventura (y mira que solo habia entrado aqui por una receta de unos «tallarines» de ¿¡Taro!?)