CAL 516,8 · HC 59,3 · PR 6,7 · GR 26,2 [100 GRS]
[¿EN SERIO QUERÍAS SABER ESTO?]
Chocolate. Dulce o amargo.
[Yo quería hablar de cosas bonitas. De verdad que sí. Chocolate, galletas, niños felices, caras manchadas, alegría y bombones. Y mis manos, en un pacto sin precedentes con mi conciencia, han decidido otra cosa. Lo siento, no he podido hacer nada, no me dejan opinar.]
Los niños que comen chocolate no son los niños que cultivan cacao.
Entre ellos, la distancia de un contiente, varios gobiernos, un puñado de guerras, y el océano. Y por encima de todo ello, las multinacionales.
En Costa de Marfil se compran regularmente niños dentro del país y a países limítrofes, especialmente Mali Y Burkina Faso. Estos niños son utilizados como esclavos en las plantaciones de cacao, café y algodón, donde trabajan más de doce horas al día, manejando machetes, sin las mínimas condiciones laborales, higiénicas o sanitarias, y sin ningún tipo de control, sufriendo continuos abusos físicos. Es una de las peores formas de explotación infantil que se conocen. Ghana y Guinea no quedan lejos de esta realidad.
Otros niños son enviados por sus propias familias, para realizar los trabajos más duros a cambio de un salario mísero, y son explotados hasta la adolescencia. Cuando son demasiado fuertes para ser intimidados por los patrones, son devueltos a sus poblados.
[Las niñas, mientras tanto, son empleadas en el servicio doméstico o como esclavas sexuales, en condiciones incluso peores]
Algunas multinacionales, para esquivar la etiqueta de slave-made chocolate [chocolate obtenido con mano de obra esclava] han ido mezclando grandes cantidades de origen indudablemente esclavo, con otras variedades más controladas. Pero las multinacionales crecen, y las variedades controladas no, y las necesidades de cacao exigen rapidez, volumen, y no admiten tanta quisquillosidad.
Muchas de ellas, en una campaña de lavado de cara, firmaron el Protocolo del Cacao. Una de ellas, cuando la pillaron pasándose el mencionado protocolo por el arco del triunfo, declaró
«Está bien, llamadlo esclavitud; pero todos sabemos que seguirán siendo pobres de todas formas»
Una gran declaración de principios, sí señor. A mí lo que me gusta es la gente clara, porque así no me devano los sesos para formarme una opinión.
La verdad es que no podía pasar por alto que charlaramos un rato sobre el chocolate y los niños. Me cuesta obviar ciertas cosas. Lo siento… no tengo arreglo.
Pero voy a terminar con una nota positiva.
Por fortuna es posible encontrar cacao y derivados procedentes de comercio justo en casi cualquier sitio. Sí, son productos caros, y yo confieso que no siempre puedo acceder a ellos, y me veo abocada a los productos de los supermercados porque mi vida es esta y mi entorno me limita, como a todos. Pero creo que cada vez que compramos un producto sostenible o de comercio justo, todos hacemos del mundo un lugar mejor.
Y todo esto viene a cuento de la invitación a participar en el reto recién inaugurado por Sweet and Salty en el que nos propone jugar con el chocolate.Y yo que necesito poco para animarme… aquí estoy!
Mi idea era cocinar algo salado y no algo dulce, pero creo que el comienzo de un nuevo reto merece una receta a la altura. Y para mí, la receta de chocolate es esta.
Puro vicio en formato galleta.
[Gracias, santa Martha]
INGREDIENTES
[2 BANDEJAS DE GALLETAS]
Chocolate fondant, 225 gr
Mantequilla sin sal, 50 gr
Harina, 90 gr
Levadura, 1/2 cta
Sal, 1/4 cta
Huevos, 2 ud
Azúcar moreno, 150 gr
Vainilla, al gusto
Perlas de chocolate, 200 gr
MODUS OPERANDI
Fase «chocolate por toda la cocina»
Lo primero primerísimo de todo, es fundir el chocolate con la mantequilla y dejar templar la mezcla. No lo necesitamos frío, pero no es recomendable que esté excesivamente caliente.
En un bol, tamizamos la harina, la levadura y la sal. Reservamos.
En otro bol, batimos los huevos con el azúcar y la vainilla hasta que estén blanquecinos y espumosos [hasta que monten]. Esto lo haremos con las varillas eléctricas a velocidad alta, o si tenemos Thermomix con la mariposa, a 37º y velocidad 3,5. Como última opción lo podemos hacer a mano, pero esto nos llevará un buen rato.
Una vez tenemos los huevos montados, añadimos a baja velocidad la mezcla de chocolate y mantequilla, y seguimos batiendo hasta que se integre. No nos llevará más de un minuto.
En este punto desenchufamos el robot o Thermomix y cogemos una espátula. Con movimientos envolventes, integramos la harina en la mezcla hasta que no queden trazas, despacio y con cuidado de no quitar volumen al conjunto.
Añadimos las perlas de chocolate y mezclamos de nuevo con cuidado.
La masa debe ser algo líquida, más parecida a una masa de brownie que a algo de lo que saldrán galletas. Paciencia. Todo llega. Y valdrá la pena.
Fase horno
En una bandeja de horno, y sobre papel o silicona de hornear, vamos dejando montoncitos pequeños de masa, de unos 2 o 3 cm de ancho, y a 4 o 5 cm de distancia entre ellos, porque se expandirán. A mí me gusta hacer esto con manga pastelera, porque se mancha mucho menos, pero se puede hacer con un par de cucharas (una para coger la masa, y otra debajo para recoger lo que gotee la primera).
Si quieres unas galletas como éstas, entonces sigue leyendo… al final de la entrada hay un mini-tutorial.
Horneamos de 10 a 12 minutos a 180º con el horno precalentado.
Fase enfriado
Sacamos la bandeja del horno, y pasamos el papel de hornear con las galletas encima a la encimera, sí, has leído bien, papel y galletas. Al cabo de 5 o 10 minutos, movemos las galletas a una rejilla. Si no me escuchas, se romperán, avisado quedas.
Cuando estén frías, guarda las que queden en una lata. Y ponla en la caja fuerte… si quieres volver a verlas.
Gracias a Martha Stewart
~ ~ ~
TUTORIAL: COMO HACER GALLETAS BONITAS CON UNA MASA PEGAJOSA E INGOBERNABLE
Queremos hacer cookies. Pero la masa de cookies es una pesadilla, es blanda, poco consistente, y no se puede dar forma. El resultado son galletas menos monas porque la masa se ha desparramado al ponerla en las bandejas, y en el horno ha crecido en completa anarquía de forma y volumen.
La solución, si no tenemos moldes específicos, es improvisarlos con un poco de papel de aluminio y otro poco de papel para horno.
Cogemos un vaso, cortador, o aro de cualquier tipo, tamaño y forma. He escogido un cortador de galletas pequeño porque me gustaba su tamaño.
Ponemos un trocito de aluminio en la base, y hacemos un pequeño molde con él.
Cortamos tiras largas de papel de horno, del ancho del molde que hemos usado, o un poco más. Dibujamos en uno de los extremos del papel el contorno de nuestro molde. Y vamos doblando el papel sobre sí mismo en zigzag, dejando arriba el dibujo. Cuando lo tenemos doblado del todo, cortamos el círculo y tendremos unos cuantos a la vez [esto es la vuelta al cole y las manualidades de aquellos muñequitos que se recortaban en tiras, os acordais?]
Colocamos dentro de cada molde de aluminio un circulito de papel de horno, esto evitará que la masa se quede pegada, ya que el aluminio no es antiadherente.
Ponemos una pequeña porción de masa en cada molde, con cuidado de que no sea mucha porque se expandirá y crecerá a lo alto. Solo queremos poner límites a la masa, no vamos a hacer muffins!
Al sacarlas del horno, dejaremos 5 minutos las galletas en estos moldes antes de sacarlas, o se romperán. Yo abro primero todos los papeles de aluminio, para que enfríen antes, y después las saco y retiro el papel de horno.
Sinplemente deliciosas!!! Tienen una pinta increible! Muchas gracias por participar en el reto! Un beso! :)
Ana, cuanto te agradezco tu lección acerca del comoercio justo, es algo que deberíamos tener siempre presente a la hora de comprar.
En cuanto a las galletas, deben ser maravillosas, enhorabuena!!
Menudo mordisco tienen estas galletas, deliciosas, como todas las recetas de Marta. Bss
Qué mono de chocolate me está entrando, Dios mío ¡¡
Tienes toda la razón en todo lo que dices, deberíamos concienciarnos más sobre estas cosas. Y las galletas te han quedado genial, tienen un aspecto delicioso! Besitos
Uff, pedazo de entrada, pedazo de receta, pedazo de truco para dar forma a las galletas… me quedo sin palbras, sólo me descubro ante ti…
Como siempre me dejas sin palabras pero encima me voy a la cama babeando al ver las fotos.
El mundo en el que vivimos es tan injusto, tan cruel, inhumano… y todos los + que le pongamos, pero que no se haga nada para que desaparezca la exclavitud, la explotación de los niños y niñas, es demencial.
Comprar chocolate de comercio justo es genial, pero como bien dices está a precios abusivos. El otro día tuve en mis manos unas mini tabletas y me pareció que en esto del comercio justo, igual tb hay intermediarios que se forran a nuestra costa. Sólo es un pensamiento mío sin fundamento, pero cada vez estoy más incrédula.
Estás hecha una artista y el tutorial lo demuestra. Me voy soñando con chocolate y con tus galletas.
Por cierto, no me salieron tus calamares encebollados. Mucho caldo extra, muy rico pero nada que ver con tu receta, Igual los míos soltaron demasiada agua.
Besos y me voy a la cama YA.
Tienen que estar deliciosas y ya preparando tus propios moldes¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ me gusta besos
Ana querida!!!
Que delicia adorei os cookies, que maravilha as fotos e apresentação . Parabéns querida.
Beijos Luci
Ah! Adorei seu cantinho , que ja virei seguidora, se puder nos visite e se quiser nos siga ficaremos muito felizes.
Mi niña,una delicia y una exquisitez de cookies,creo que nadie puede resistirse a esta delicia tan maravilosa.
Un post realmente maravilloso.
Mil besitos y gracias por tu receta.
Por desgracia en occidente nos queremos olvidar de que la esclavitud está lejos de ser cosa de un pasado remoto, aunque no se quiera llamar exactamente así :(. La gente no quiere saber cómo se han obtenido sus productos o cómo se ha fabricado su ropa, y a las grandes compañías les da igual…. Menos mal que queda gente concienciada como tú! Gran post.
Y mejor terminarlo con una receta taaaaaan dulce y chocolateada :D. Pero por favor, no pongas las calorías, grasas y azúcares en recetas así, jajaja.
Un abrazo
Me parece de extrema importancia tomar conciencia de la reflexión que has hecho, porque lo peor es que no sé tiene ni idea de estas cosas. Voy a difundir un poquito tu post.
Un gran post, no está de más que alguien nos recuerde de vez en cuando que la esclavitud todavía existe. En cuanto a las cookies tienen una pinta deliciosa! Un besote!
Guau!! Maravilloso. Me ha encantado leerte! Mis felicitaciones!!
Besos
Que truco mas chulo el de los moldecitos con aluminio, es verdad que hay masas que se desparraman y es un rollo porque se pegan unas a otras.
Las galletas te han quedado de lujo.
Besos
Lo de la explotación infantil es terrible y por desgracia muy común en muchas partes del mundo.
Las galletas estupendas, pero se le quitan a uno las ganas de utilizar chocolate.
Buah! pero que pinta más rica tienen estas galletas… y de chocolate!!, yo quierooo!!
Ana, que olor más bueno te habrán dejado en la cocina.
Felicidades y gracias por la receta..
BSS
http://loquenoquierasqueserepitanolocuentes.blogspot.com.es/
Buah! pero que pinta más rica tienen estas galletas… y de chocolate!!, yo quierooo!!
Ana, que olor más bueno te habrán dejado en la cocina.
Felicidades y gracias por la receta..
BSS
http://loquenoquierasqueserepitanolocuentes.blogspot.com.es/
Que ricas….!! son de las que debes de empezar por probarlas y no puedes parar…
mmmmm…. me apunto la receta con tu permiso
Besos
Me acaba de venir un antojo que no veas, y es que estas galletas para mi merienda serían ideales. ¡Menuda pinta!
un saludo
Angi
La verdad… no me gusta nada cocinar… veo tus imágenes y me parece que tendría que gustarme poder hacer algo con tan buena pinta…
pero nada, no hay forma, casi ni leo la receta..
No creo que haga la receta, pero se que a partir de ahora voy a comprar chocolate de comercio justo, eso si que lo tengo claro ;)
Menos mal que consigues endulzar la primera parte amarga del post con estas galletas de chocolate tan rico. Qué buena pinta tienen!! Para empezar y no parar…
Un besazo
Muchos de nosotros no estamos concienciados con cómo las multinacionales tienen gobernado el mundo con eso de la globalización, y yo me incluyo, y la primera. Soy conocedora del tema porque es más, lo he tratado con mis alumnos en el aula mediante proyectos. Yo creo que el mayor inconveniente para no concienciarnos del todo es el no estar directamente afectados por esta situación, porque de estarlo, nuestra forma de ver las cosas y de actuar cambiarían.
Parece mentira que el buen sabor de boca que el chocolate deja en nuestra boca se vuelva agrio por todo lo que cuentas; aún así, seguiremos comiendo chocolate en la misma medida en que lo veníamos haciendo hasta ahora.
Veo que la masa te las ha dado para poder llevarla por buen puerto. Pero también veo que la maña hace que salgas bien airosa de situaciones un tanto engorrosas y hasta nos has preparado un invento para salir airosos del manipulado de la masa de estas galletas, que por cierto, si son como un brownie, como para parar de comerlas, je je je.
Besos!!
Qué duro es pensar que hay niños que siguen trabajando como esclavos… pero es peor cerrar los ojos a esa realidad.
En cuanto a las galletas, ¡madre del amor hermoso!. Complicadita de manejar esa masa, sí, pero el truco que nos das me parece genial, y el resultado merece la pena: yo no podría parar de comerlas.
Un besote grande.
Por Dios pero que pintazaaaa!!
Estéticamente parece una mezcla entre galletas, mini-brownies y macaroons! Y de chocolate….la haré ya mismoo!! :)
Un abrazo
Me hace gracia «Santa Martha», «San Google» como sigamos así necesitaremos un nuevo santoral. En cuanto a tu «invento» improvisado me parece ingenioso, lo tengo en cuenta. Porque cuando te dedicas a la cocina la imaginación es un valor al alza.
Las galletas no las comento porque sobran las palabras y con respecto a la explotación infantil en la recolección puedo decirlo más alto más claro NO.
Besos
Sólo con verlas me puedo imaginar el olor que han dejado en tu casa. Me quedo de seguidora y me llevo unas poquitas a:
http://unangelenmicocina.blogspot.com.es/
Besos.
Hola Ana, gracias por tu visita a mi blog, te devuelvo la visita y me ha impactado bastante tu entrada, receta y galletas aparte, que son para estirar la mano y cogerlas a través de la pantalla… Encantada de conocer tu blog, besos :)
está bien dar a conocer que hay un 11% de niños en el mundo que son explotados.
Y tu receta es maravillosa, con una fotos espectaculares
Hola preciosa, por fin puedo venir en condiciones!! Ais tienes toda la razon del mundo, deberiamos comprar siempre que podamos cosas del comercio justo, porque como dices nosotros disfrutamos de los productos que venden, pero no nos damos cuenta que en el otro continente no están disfrutando de ellos.. aais, ojalá me lo pudiese permitir tambien, aunque intento siempre que puedo comprar algo, ni que sea una chocolatina. Y que decirte de las galletas, me han encantado, me parece super ricas y me parece muy curiosa su textura, no sé, me recuerda a un brownie pero en galleta! Gracias por ese mini tutorial, que gran idea!! No habia pensado nunca, pero tienes razon, asi las galletas quedan más monas y además, no corremos el riesgo de que sea una mega cookie! jajaja Un besito guapa
Me paso por tu blog para conocerlo y me ha encantado leer algo más que cocina. Chapó por hablar alto y claro. Y la receta genial eh! Y con truco y todo.
Saludos, Monie. >_<
hola! solo de verlas ya me estoy quedando alucinada, que delicia!
me quedo por tu blog, me gusta mucho las entradas con historias y me ha encantado, besitos
Silvia
chup-chup-chup
Da gusto encontrar una persona tan espóntanea y sincera. Me quedo! Besos Mariola