ALBÓNDIGAS DE POLLO AL CURRY [Vergüencita en el fisio]

Qué vergüenza he pasado.

Os lo cuento porque estas cosas es mejor pasarlas en compañía y si alguien me dice que ha vivido la misma experiencia, oye, que me siento igual de ridícula pero al menos, siento que no estoy sola.

He ido al fisioterapeuta. Mi fisio de siempre está de baja por maternidad, y ha dejado a sus pacientes en manos de un chico que ha empezado a trabajar en esa clínica hará un par de meses. Ella ya me avisó cuando cogí la cita de que él tiene una manera de trabajar totalmente diferente, pero a mí me parece bien cualquier cosa que termine con mi cuerpo menos dolorido de lo que suele estar, y tampoco hice más preguntas.

Mal.

Siempre hay que hacer más preguntas.

Fui al fisio después de trabajar, pero antes, hice como hago siempre, pasé por casa para ponerme un sujetador un poco viejuno que no me importa en exceso que acabe pringado con los productos del tratamiento [básicamente aceites para que las manos deslicen]. No os lo he contado, a lo que voy al fisio es a tratar mi hombro, que tras una rotura que sufrí hace ya algún tiempo, sigue con molestias ocasionales.

Llegué a la clínica, nos presentamos, y el chico nuevo, muy atento, me empezó a hacer muchas preguntas para hacerme una ficha de paciente. Yo soy paciente de esta clínica desde hace más de cinco años, pero me pareció lógico que quisiera su ficha propia si me iba a tratar. Además de esto, me anunció que me haría una evaluación integral para valorar qué me duele, y como tengo el resto del cuerpo aunque no me duela [posturas, posición de huesos… qué se yo lo que me miró].

Hasta aquí, vamos bien.

Me invita a pasar a la zona de camilla, y ahí me suelta a bocajarro que me quite toda la ropa excepto la ropa interior. -¿Toda? -Sí, toda. -Ya pero… verás, que yo venía por el hombro. -Ya, pero quiero valorarte y necesito verte entera para ver como apoyas pies, caderas…

En estos momentos, yo sé que estoy en un médico y que este mozo ha visto muchas veces a incautas como yo pasando un corte que no veas porque… a ver, que yo iba a darme un repaso al hombro. Hombro. El hombro está en la parte superior del cuerpo, sí, es obvio ya lo sé. Y en la parte superior del cuerpo yo llevo el sujetador viejuno [y blanco… o algo parecido] que si se macha con productos de masaje no me importa. Y no he tenido ninguna otra consideración a la hora de vestirme. Y en la parte de abajo… Llevo un tanga. Y no un tanga cualquiera. Llevo la mínima cantidad de tela con hilos que exige la ley para que te lo vendan como tanga. Es negro, que no hace juego con el sujetador. Y de encaje. Mucho. Ea. Y me veo ahí, despelotada, con el sujetador viejuno de color indefinido, un tanga minúsculo y calcetines gordos de rayas rosas y grises.

Y de esa guisa, el mozo me empieza a pedir cosas: anda avanzando hacia mí por la clínica [sólo se atiende a un paciente por turno, estábamos solos, el resto de actividades las hacen en un aula separada], ahora anda hacia la pared de espaldas a mí, pon la mano aquí, mueve la espalda a izquierda y derecha, apoya pies juntos, separa las manos del cuerpo y avanza hacia mí… Yo sólo pensaba en el cuadro que estaba hecha. No os puedo decir ni qué diagnóstico me dio porque estaba pasando la vergüenza máxima paseándome por la clínica con esas pintas.

Que no me entendáis mal, que vergüenza por estar medio despelotada, ninguna, y menos aún con un fisio. Pero coñe, esto me lo avisa, me pongo una braga tamaño estandar, de esas que son como culottes, y a ver, más cómoda que con aquello pues hubiera estado, las cosas como son. Que no tenemos tanta confianza y este señor ya ha visto como voy depilada, vamos a entendernos.

Y unos calcetinitos monos en lugar de unos gordos de rayas porque iba con botas y no se veían. Que vale que esto es el fisio y no Tinder, pero… jo, que una tiene una imagen!

ALBÓNDIGAS DE POLLO CON CURRY

INGREDIENTES

  • Para las albóndigas
    • Pollo picado, 500 g [yo suelo usar contramuslos, son algo más jugosos que las pechugas]
    • Huevo, 1
    • Avena en copos, 50-100 g
    • Sal
    • Pimienta
    • Curry, 1/2 cucharadita
    • Además:
      • Harina, 3-4 cucharadas [para rebozar]
      • Aceite, 2-3 cucharadas [para sofreír las albóndigas]
  • Para la salsa
    • Aceite, 2 cucharadas
    • Cebolla, media
    • Zanahoria, una
    • Vino blanco, 75 ml [medio vasito]
    • Caldo de pollo, 500 ml
    • Leche de coco, 100 ml
    • Curry en polvo, 1 cucharadita
    • Sal

MODUS OPERANDI

Empezamos formando la masa de albóndigas, que debe reposar media hora para que tome consistencia. Mezclamos en un bol todos los ingredientes: carne picada, huevo batido, avena en copos [puede ser pan rallado si te gusta más] y condimentos. Lo dejamos reposar para que la avena absorba los líquidos y la masa sea más manejable. En este rato picamos menuda la cebolla y la zanahoria y pesamos y preparamos el resto de ingredientes.

Cuando haya pasado media hora, formamos las albóndigas y las enharinamos. En una sartén con dos cucharadas de aceite, vamos friendo las albóndigas en varias tandas, y las sacamos a un plato.

Pasamos a la salsa. Una vez hayamos acabado con las albóndigas, ponemos en la sartén otra cucharada de aceite y comenzamos a pochar la cebolla y la zanahoria a fuego medio. Cuando estén ya blanditas y transparentes, añadimos a la sartén el vino blanco, y dejamos que se cocine un par de minutos, hasta que el alcohol evapore. Añadimos entonces el caldo y la leche de coco, y dejamos cocinar junto otros 5 minutos más.

En este punto decidimos si queremos batir la salsa o no. Yo decidí hacerlo, así que la pasé al vaso de la Thermomix y la trituré hasta tener una salsa muy fina.

Devolvemos la salsa a la sartén y añadimos las albóndigas. Dejamos que se cocine todo junto unos 15-20 minutos, hasta que estén del todo cocinadas. Rectificamos el líquido si hace falta añadiendo algo más de caldo de pollo.

2 comentarios en «ALBÓNDIGAS DE POLLO AL CURRY [Vergüencita en el fisio]»

  1. Eu

    Pregunta, cómo picas los muslos de pollo ? A lo mejor se lo pides al carnicero… es que me está tentando comprarme una picadora de carne, y no sé si luego terminará haciendo amistad con la heladora, la grofera, la fondue….

    Por cierto, gracias. Desde el encierro me hace mucha más ilusión leerte, nunca sé que contarás, pero me animas el día

    Responder
    1. Hola! Se lo pido al carnicero. Le pido contramuslos, que son jugosos, al menos más que la pechuga.
      Una picadora… no he tenido nunca, no sabría decirte. Yo antes de comprar juguetes nuevos (heladera…) veo si tengo alternativa, si lo puedo hacer de otra forma o pedir que me lo hagan, porque no tengo una cocina muy grande y el espacio cotiza al alza… Solo compro si no tengo opción, de lo contrario, había empezado a acumular trastos hasta debajo de la cama xD xD xD

      Responder

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