POLLO CON CIRUELAS Y PIÑONES [Reuniones, obras y soluciones sobre la marcha]

Pollo con ciruelas Pollo con ciruelas 

Os pongo en situación.

Tengo una reunión con una persona muy importante. Yo, que nunca me reúno con personas importantes. Me he puesto el único traje apolillado que tengo donde cabe mi trasero, y lo he hecho con la chaqueta abierta porque a) hace calor y b) así no se nota que está pasado de moda porque no se ven las solapas. He hecho un poco de sitio en mi armario donando aquellos otros trajes que guardaba porque lo mismo me siguen valiendo. No me valen.

El traje en cuestión es beige clarito, un color que me sienta como una patada pero estaba de oferta cuando lo compré, en algún momento de mi prehistoria personal, y con una blusa de color teja, me queda más o menos apañado. Merceditas beige y bolso. Más mona que iba.

Voy yo camino a mi reunión con persona importante. En mitad del trayecto entre mi casa y su oficina, hay una obra, que debo atravesar si quiero salir de la calle donde me veo atrapada y cuyo rodeo es un follón de tres pares, y voy justa y los obreros han puesto unos tablones estupendos para pasar por encima. Total, que paso. Y pasando, el pie se me va del tablón y acabo metiendo hasta el tobillo en un charco de agua embarrada. Biennnnnnnnnnn.

Esto ocurre a más de una hora de mi casa, de modo que volver y cambiarme el traje por… otro traje que no tengo no es una opción. Ir de compras tampoco, porque las tiendas abrirán dentro de dos horas. Sólo me queda improvisar.

Así que llamo a la secretaria de persona importante para contarle que he pillado caravana [y rezo porque no me ofrezca usar el parking ya que voy en metro]. Retraso la reunión. Y con el traje y los zapatos llenos de barro, opto por una solución… rara, pero eficaz. Para los zapatos hago todos los pucheritos que soy capaz sin perder [mucho] la dignidad a un señor que se dedica a limpiar calzado en la zona por la que estoy. Suerte que lo encuentro. El hombre me mira con compasión y me pide lo que le da la gana por ayudarme, cosa que acepto porque mis alternativas son… ninguna. 

Acto seguido con los zapatos más limpios que cuando los compré, las medias en la mano y el pantalón con barro hasta las rodillas, entro en una cafetería, la más concurrida que encuentro. Hay tres personas además de mi misma. Pido un café, paso al baño, y lo siguiente que recuerdo es a una señora con cara de susto que abre la puerta del baño y me encuentra sentada en bragas sobre la encimera del baño secando el bajo de los pantalones y las medias en el secador de manos, justo tras haberlo limpiado todo en el lavabo.

Sí. Lavé como pude el pantalón en el lavabo de una cafetería y lo sequé con lo que encontré. Punto. Llegué a la reunión con el retraso anunciado. Fue… ni bien del todo, ni mal del todo. Pero eso sí. Limpita y aseada, llegué. Con mis zapatos impecables y el pantalón limpio, un poco húmedo pero ni se notaba, y casi casi sin arrugas. No fue poco para como empezó la mañana, si lo pienso bien.

De la reunión me fui para casa, pero antes compré en los alrededores del sitio donde trabaja persona importante un par de ingredientes para hacer la comida. Había comercios árabes y una no sabe renunciar a un buen cuscus o una canela decente. La comida en cuestión iba a ser un pollo con ciruelas y piñones reconfortante que he chorizado vilmente a Belén, de El toque de Belén, para el #asaltablogs invisible de este mes. No la hice según llegué a casa porque ese día parecía que mi karma estaba un poco torcido, y no era plan de encender fuegos. Dejé mi comida en manos del microondas, y al día siguiente, ya sábado, me ocupé con toda la calma necesaria y el karma un poco más espabilado, de preparar esta delicia para comer.

Pollo con ciruelas  Pollo con ciruelas

 

POLLO CON CIRUELAS Y PIÑONES

CAL 494,9 · HC 16,5 · PR 34,0 · GR 27,3 [100 G]

INGREDIENTES
[2 PERSONAS]
 
Pechuga de pollo de corral,  300 g
Cebolla, un cuarto [50 g]
Puerro, un trozo de unos 6-8 cm [50 g]
Ajo, 1 diente
Tomate, 2 pequeños [150 g]
Ciruelas pasas, 5-6
Piñones, 25 g
Canela, una ramita pequeña
Vino blanco, 2 cucharadas grandes [30 ml]
Coñac, 2 cucharadas grandes [30 ml]
Harina de maíz [tipo maicena], 1 cucharadita
Aceite de oliva, 2 cucharadas

Sal, pimienta

MODUS OPERANDI

Antes de empezar, preparamos todos los ingredientes para tenerlos a mano mientras los necesitemos. Al ser un salteado, no dará mucho tiempo a preparar cosas sobre la marcha.

Limpiamos la verdura, cortamos en juliana el puerro y la cebolla; picamos el ajo muy menudo; y los tomates los pelamos y cortamos en daditos. No dejes de quitarles la piel salvo que sea muy muy fina, o los pellejos se quedarán esparcidos por todo el plato y serán desagradables.

Por otra parte, cortamos el pollo en tiras y las salpimentamos. Y dejamos preparadas las ciruelas, los piñones y la canela.

En una sartén ponemos a calentar el aceite. Cuando tenga temperatura salteamos a potencia alta las tiras de pollo y dejamos que se doren ligeramente, sin cocinarlas del todo [5 minutos]. Añadimos la cebolla, el puerro y el ajo, bajamos el fuego a potencia media, y seguimos cocinando hasta que la verdura esté tierna. Incorporamos ahora el tomate, las ciruelas, los piñones y la rama de canela. Dejamos que el tomate se cocine unos 5 minutos más. 

Por último, añadimos el vino blanco y el coñac, tapamos la sartén y dejamos cocinar todo junto unos 10 minutos, o hasta que el pollo esté hecho. Ten en cuenta que en función del grosor del pollo tardará más o menos, esto es orientativo.

Por último, cuando esté casi hecho, ponemos en un vaso un dedo de agua fría, añadimos una cucharadita de harina de maíz y la disolvemos. Lo incorporamos al guiso, para que la salsa se trabe y se adhiera al pollo. No es imprescindible pero da muy buen resultado.

Servimos acompañado de arroz blanco, o como aquí, de un couscous sencillo hecho con ras-el-hanout y una pizca de sal, sin nada más.

Pollo con ciruelas y piñones

11 comentarios en «POLLO CON CIRUELAS Y PIÑONES [Reuniones, obras y soluciones sobre la marcha]»

  1. Te lo digo en serio, vende tus historias a guionistas de televisión, o conviértete tú en una!
    Lo veo como serie animada incluso… o simplemente como relatos, qué leches, en un librito para tener siempre a mano cuando necesitamos una dosis de realidad pero con humor ^_^.
    Yo no tengo ni un solo traje y no sé qué haría si me viera en tu situación, porque además soy muy de mancharme absurdamente en el momento menos oportuno.
    Vas camino de ser mi heroína urbana!

    Ay la receta me ha dado morriña, que mi madre prepara un pollo en salsa muy parecido con ciruelas, piñones, orejones de albaricoque…y acompañado de cuscús!

    Un abrazo

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  2. Siempre hay tablones en el momento menos preciso y en el lugar menos indicado…como también hay cafés oscuros que se derraman en camisas blancas y las alternativas…ninguna!!! Eres genial contando momentos de tu vida a los que le añades ese toque de ironía y humor inteligente, como también lo eres a la hora de elaborar deliciosos platos y para muestra este delicioso pollo con sus piñones, las ciruelas y un cuscús que quita el hipo. Bss

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  3. Ana, sabes que me encantan tus historias, yo no se a que espera para escribir un libro, estoy segura que tendría mucho éxito, eres maravillosa escribiendo. Bueno al final se arreglo todo jajja menos mal, que no se notaba lo de traje jiji.
    Y me alegro que hayas dejado el pollo para el día siguiente, no sea que te saliera mal jajajaj.
    Este pollo me encanta y por supuesto con couscous va genial, me alegro que te haya gustado. Has hacho un buen asalto.
    Muchisimas gracias por el esfuerzo de este mes.
    Un beso enorme
    El toque de Belén

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  4. Ana tus historias siempre apetece leerlas y por ver como acaban porque sabes mantener el interés hasta el final.
    Y el sábado con la tranquilidad que da el finde te marcaste una buena receta y apetecible.
    Bss

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  5. No me quiero imaginar en tal situacion vamos que ni de coña me habria atrevido a quitar el pantalon ,lavarlo en el lavabo y luego secarlo con el secador de manos , si es que la que vale vale pa toooooooooo.
    Seguro que a Belen le ha encantado tu asalto ,te ha quedado un pollo de relujooooooooo ademas de estar de rexupete.
    Bicos mil y feliz finde wapa.

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