PUDDING DE ACELGA Y PATATA [Y pucheritos]

CAL 173,8 · HC 12,2 · PR 9,1 · GR 9,6 [POR RACIÓN]

 

Acelgas.

La palabra acelgas, en mi casa, va seguida de morritos, pucheros y aspavientos. Siempre.

No son bienvenidas.

Las hemos tenido amarillas, rojas y las clásicas acelgas verdes, de penca ancha y de penca finita. Nada. Que no. Así, de entrada, generan rechazo.

Esto, no sería mayor problema si no fuese porque a) yo las adoro y b) el productor ecológico que nos sirve verdura a través de un grupo de consumo, las adora, las cultiva y en consecuencia, nos las trae.

Hace años que pertenezco a este grupo de consumo. Nuestro sistema parte del respeto absoluto a la tierra, el productor nos trae verdura en función de lo que la tierra haya dado, y como la tierra no es un supermercado, es ella quien decide cuantas acelgas da y cuando, y quien decide cuando hay o no patatas.

Cada reparto de verdura es una sorpresa. Nadie sabe qué vendrá, qué habrá decidido crecer o cuanto de cada cosa nos encontraremos.

Lo que no suele ser sorpresa es que habrá acelgas. Siempre las hay. La tierra ha decidido que siempre haya acelgas. Y yo, feliz. Y el Soñador, haciendo pucheritos.

He intentado todas las estrategias posibles, y me he sumergido en todo tipo de recetarios buscando esas acelgas que le conquisten. He obviado técnicas del tipo «enterrar en abundante bechamel» o «acompañar con gran cantidad de bacon».

De todos mis intentos, han tenido éxito: Acelgas esparragadas, potaje de verduras con acelgas, acelgas rehogadas con [el suficiente] jamón.

Y han fracasado estrepitosamente el puré de acelgas, puré de cualquier verdura con acelgas, y la tortilla de acelgas, incluida cualquier versión con salsa de tomate o cualquier aderezo que disimule su sabor.

Así que en estas me vi cuando decidí que lo intentaba una vez más, para inclinar la balanza, para ver si era capaz de incluir un nuevo plato de acelgas en nuestras cenas, sin tener que compensar a nadie después con muchas galletas de chocolate.

¿El veredicto?

Mmmm, están buenas

[La gata se acercó al plato, lo olisqueó y se fue sin decir ni miau]

Vale. El Soñador y la gata no dieron palmas. Nadie saltó de alegría en los sofás. No se hizo una fiesta. Ni se señaló la fecha en el calendario. Pero los platos quedaron limpios, y esto, habiendo acelgas en la ecuación… creedme, es mucho.

INGREDIENTES
[3 PERSONAS… O 2 MUY HAMBRIENTAS]

Patatas, 150 gr
Acelgas, 300 gr
Ajo, 1 diente
Huevos, 3 pequeños [o 2 grandes] a ser posible de gallinas felices y libres [sí, puestos en mitad del campo]
Aceite, una cucharada [15 ml]
Sal, pimienta, nuez moscada
 

MODUS OPERANDI

Necesitamos tener las verduras cocidas, para ello, lo primero que hacemos es poner agua a hervir en una olla, y mientras sube la temperatura, vamos pelando las patatas y limpiando las acelgas. Separamos las hojas de los troncos si vemos que son firmes y gruesos [estos míos eran tan finos que no hizo falta].

En el agua, ponemos sal o concentrado de verduras, las patatas en cuartos, y los troncos de las acelgas, y los dejamos hervir a fuego medio unos 10 minutos. Pasado este tiempo, incorporamos las hojas y lo hervimos todo otros 5 o 10 minutos. De esta manera arreglamos todo en un mismo agua de cocción.

Ya lo tenemos todo cocido. Separamos por un lado las acelgas, y por otro las patatas.

Las acelgas las escurrimos bien, y cuando están sin líquido las pasamos a una tabla de cortar y las cortamos menudas. Hacerlo así tiene un sentido: ahora se cortan muy bien y al estar compactadas, podemos cortarlas muy finas sin apenas esfuerzo. Pero si te gusta más las puedes cortar antes de cocer.

En una sartén, ponemos a dorar un ajo, o dos, al gusto. Y cuando empiece a tomar color, echamos las acelgas escurridísimas, y las rehogamos hasta que evapore todo el líquido que pueda quedar.

Por otra parte, mientras se rehogan, hacemos puré con las patatas. Yo me limité a espachurrarlas bien con un tenedor, pero las puedes pasar por un pasapurés. Nunca uso para esto un robot de cocina, el puré coge una textura que no me gusta, pero esto es un gusto personal, claro!

Por otra parte, en un bol, batimos los huevos con sal, pimienta y nuez moscada.

Bien. Ya tenemos por un lado las acelgas rehogándose con el ajo, por otro el puré de patata, y por otro los huevos batidos.

Una vez las acelgas hayan evaporado todo el líquido, las mezclamos con el huevo y a esta mezcla añadimos el puré. Hay que trabajar con rapidez, para evitar que el huevo cuaje al contacto con el calor [sin pasarnos, solo que no podemos irnos a otra parte y dejarlo abandonado…]

Ahora solo tenemos que rellenar los moldes, o el molde, o lo que hayamos elegido. Yo he usado moldes de pudding sencillos, me gustan así.

Se mete al horno precalentado 20 minutos a 180º, y después de apagado se puede dejar 10 minutos más para que templen.

Lo he servido con salsa casera de tomate.

 
 

23 comentarios en «PUDDING DE ACELGA Y PATATA [Y pucheritos]»

  1. ¡Ay, las acelgas! ¡Qué injustamente tratada esta verdura! Yo te aseguro que con la pinta que tiene tu elaboración y con la procedencia de tus acelgas, daría palmas con las orejas y saltaría sobre los sofás…

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  2. Ainssss, Anita. A mi me pasa lo que al soñador y a la gata!! Cuando en casa hay acelgas, pongo morritos, hago pucheros y me cruzo de brazos en actitud de «me enfado y no respiro». Y es que mira que lo he intentado de todas las maneras posibles, pero no me gusta su sabor. Soy incapaz de terminarme el plato. Aun así, como soy un poco masoca, lo intentaré con tu receta, porque tiene una pinta estupenda y me gustaría encontrar una receta con la que poder incorporar esta verdura a mi dieta.

    Un besazo

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  3. Yo cultivo una huerta ecológica y lo bueno que tienen las acelgas es que se dan todo el año, invierno y verano! por eso es un ingrediente habitual en mi cocina. En mi caso uno de mis hijos que no le gustan mucho las acelgas, como a tu soñador, sentenció que estaban bien, no para echar cohetes pero se comió todo el plato sin rechistar. Y mi gata ni se acercó, jajaja. Besos

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  4. Muy buena pinta y muy buena idea para camuflar las pobres acelgas!! Yo lo intento rebozando las pencas y acompañándolas de una rica salsa de pimientos o de setas..en mi tierra son un manjar cocinadas de esta manera!

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  5. En mi casa las acelgas son bien aceptadas, no siendo así las espinacas, que causan desagrado en todos y cada uno de los habitantes de esta casa, jejejeje !!!

    Las acelgas presentadas así me resultan curiosas y una manera distinta y divertida de comerlas !!!

    Yo me decanté por la receta dulce, porque la conocía y tenía ganas de volver a hacerla !!

    Besos

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